Marie estaba teniendo un día difícil. Más agitada y angustiada que de costumbre debido a los síntomas relacionados con su diagnóstico de demencia, los cambios significativos en la medicación y la adaptación a su reciente cambio a Messiah Lifeways, parecía que no podía encontrar la paz. Pero una interacción con la musicoterapeuta certificada por la Junta, Kristyn Beeman, financiada por el nuevo programa de terapia musical de Snelbaker, marcó la diferencia.

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Durante mucho tiempo, la vida de Marie se ha caracterizado por su amor por la música y la danza. Su hija, Jolene, recuerda con cariño una infancia llena de los sonidos de Frank Sinatra y Rat Pack a todo volumen en la radio y la vista de sus padres bailando alegremente juntos en la cocina. Marie y Frank, quien falleció recientemente, amaban los espectáculos de Broadway, la sinfónica, los bailes locales y cualquier oportunidad de disfrutar de la música.

Quizás por eso Marie tuvo una respuesta inmediata a las intervenciones de Kristyn como musicoterapeuta. Su rostro y comportamiento cambiaron de inmediato cuando la música la invadió y calmó sus nervios agotados. Con otra hija, Marg, mirando con asombro, Marie cantó, aplaudió e incluso intentó bailar mientras Kristyn tocaba canciones como "I Did it My Way" y "Accentuate the Positive". Marg compartió entre lágrimas que era la primera vez que veía sonreír a su madre en dos meses. En un momento conmovedor,

Marie puso ambas manos en las mejillas de Kristyn, la atrajo hacia sí, la besó y dijo "eres agradable".

Este es el poder de la musicoterapia como una intervención innovadora y con visión de futuro para la demencia, la enfermedad de Alzheimer, el Parkinson, la discapacidad del habla y una serie de otros diagnósticos cognitivos, emocionales y físicos.  

Y es un ejemplo inspirador de lo que puede suceder a través de la generosidad de un donante con una visión y el deseo de marcar la diferencia. Carlyn Snelbaker, quien creó el programa de musicoterapia Snelbaker en memoria de su esposo, Richard Snelbaker, Esq, dice: “La música es universal... atrae sin importar nuestra política, nuestra etnia y nuestros antecedentes. Todos necesitamos la música que nos ayude a trascender nuestras circunstancias”.

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El programa de musicoterapia de Snelbaker trae musicoterapeutas a Messiah Lifeways tres días a la semana para trabajar con residentes en vecindarios de ancianos, viviendas mejoradas y un grupo de apoyo para viviendas residenciales. Estamos agradecidos por este programa transformador y la generosa filantropía que lo hizo posible.